
Una alianza innovadora en la aviación europea está a punto de despegar, prometiendo un avance significativo en la reducción de emisiones. Vueling, la reconocida aerolínea del grupo IAG, ha anunciado la firma de una carta de intenciones con la empresa australiana MicroTau. Este acuerdo marca el inicio de la exploración y futura implementación de una revolucionaria tecnología inspirada en la naturaleza: la «piel de tiburón» aplicada a las aeronaves.
Vueling se posiciona como la primera aerolínea en Europa en adentrarse en el estudio y la certificación de la «Riblet Modification Package» de MicroTau. Esta colaboración activa es fundamental para validar la aplicación de esta innovadora lámina en la flota de aviones de fuselaje estrecho de la compañía, un paso crucial hacia una aviación más sostenible y eficiente.
Reducir la resistencia
La esencia de esta tecnología reside en una película de vanguardia que imita la intrincada textura microscópica de la piel de tiburón. A simple vista, la piel de estos depredadores marinos parece lisa, pero al microscopio revela una superficie surcada por diminutas estructuras llamadas riblets. Estas micro-ranuras tienen una sorprendente capacidad para reducir la resistencia al avance cuando el animal se desplaza por el agua, permitiéndole moverse con mayor fluidez y eficiencia. Trasladando este principio de la hidrodinámica a la aerodinámica, MicroTau ha desarrollado una lámina adhesiva que, aplicada al exterior del fuselaje de los aviones, promete mejorar sustancialmente su rendimiento aerodinámico. Esta mejora podría traducirse en una reducción de las emisiones de carbono de hasta un 4%, un porcentaje considerable en un sector con una gran huella de CO2.
La perspectiva de integrar esta tecnología en la totalidad de la flota de Vueling representa un hito de gran relevancia para la aerolínea en su camino hacia una aviación más respetuosa con el medio ambiente. Así lo ha expresado Franc Sanmartí, director de Sostenibilidad de Vueling, quien ve en la potencial certificación de MicroTau una oportunidad para dar un salto cualitativo en sus objetivos de sostenibilidad.
Ahorro de costes
Por su parte, Henry Bilinsky, consejero delegado de MicroTau, ha enfatizado el enfoque de su empresa en proporcionar una solución integral basada en la «piel de tiburón» a los operadores aéreos. Su visión es clara: no solo contribuir a la reducción de emisiones, sino también generar un ahorro significativo en los costes operativos para las aerolíneas, lo que convertiría esta innovación en una propuesta atractiva tanto desde el punto de vista ambiental como económico.
Este desarrollo subraya la constante búsqueda de la industria aeronáutica por soluciones innovadoras que permitan conciliar el crecimiento del tráfico aéreo con la urgencia de descarbonizar el sector. La inspiración en la biomimética, en este caso, la eficiencia natural del tiburón, demuestra cómo la naturaleza puede ofrecer respuestas creativas a los desafíos tecnológicos más apremiantes de nuestro tiempo.