FUENTE: FREEPIK

Un estudio liderado por el Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (CREAF), en el que participa la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), advierte cuáles son los bosques con mayor riesgo de morir debido a la sequía. El objetivo principal de este estudio ha consistido en el desarrollo de unos mapas mundiales para determinar qué bosques tienen más riesgo de morir por culpa de la falta de agua.

Pablo Sanchez-Martinez, investigador del CREAF, es el autor principal del estudio publicado en la revista Nature Ecology and Evolution. Según el modelo de predicción publicado, los bosques más vulnerables están ubicados en el noroeste de la Amazonia y de los Estados Unidos, el sur de Australia y en la cuenca mediterránea.

Los bosques ocupan un 30% de la superficie terrestre del planeta

La superficie total de bosques que existen en la Tierra ocupan aproximadamente un 30% de la superficie terrestre del planeta, lo que equivale a 4.000 millones de hectáreas de la superficie terrestre del planeta. Las selvas tropicales son los ecosistemas con mayor biodiversidad de la Tierra, a pesar de ocupar el 2% del planeta. En ellas habitan más del 50% de los seres vivos del planeta.

El lema del «Día Internacional de los Bosques» para este año 2023, celebrado el pasado 21 de marzo, es Bosques y salud, mediante el cual se pretende realizar un llamamiento para cuidar de los bosques, no solo beneficiarnos de ellos. Solo a través de unos bosques sanos conseguiremos tener poblaciones sanas.

Por tanto, teniendo en cuenta que los bosques cubren un tercio de la superficie terrestre y desempeñan una función clave para la vida del planeta y son los ecosistemas terrestres más diversos, donde se concentra más del 80% de las especies animales y vegetales, su conservación se hace indispensable para el planeta.

¿Qué novedades incluye este nuevo método?

El nuevo método ha sido publicado para localizar cuáles son los bosques más vulnerables a esta falta de agua. Muchos de los bosques ubicados en el noroeste de la Amazonia y de los Estados Unidos, el sur de Australia y en la cuenca mediterránea están sufriendo mortalidad debido a un aumento en la frecuencia e intensidad de la sequía.

La principal novedad de este nuevo método es que evalúa el bosque como un ecosistema entero, un conjunto de organismos que responden de forma diferente a las condiciones externas. Este hecho permite predecir en una escala mucho más grande los impactos del cambio climático en los bosques de todo el mundo.

Para realizar estos mapas a escala mundial, los investigadores incluyen los siguientes datos dentro de este innovador método:

Datos evolutivos
Hacen referencia a cómo ha evolucionado la adaptación de los bosques más vulnerables a la sequía.
Datos fisiológicos
Determinan las estrategias de miles de especies para superar la falta de agua.
Datos del suelo
Tienen la capacidad de mostrar con detalle cada bioma de la Tierra.

Pablo Sanchez-Martinez, autor principal del estudio, señala lo siguiente sobre el desarrollo de este nuevo método:

Los datos fisiológicos por especie nos dicen que muchos árboles mediterráneos están muy bien adaptados a la sequía. Aun así, nuestro modelo apunta que estos bosques tienen un riesgo muy alto de sufrir muerte por sequía. Esto se debe a que nuestro método permite hacer un zoom-out y ver que esta zona contiene también especies muy sensibles a la sequía y que sufrimos sequías cada vez más frecuentes y largas.Pablo Sanchez-Martinez

¿Por qué son importantes los bosques para el medio ambiente?

Los bosques son ecosistemas forestales que nos brindan diversos servicios a la población mundial. Apoyan el equilibrio del ciclo del agua, además de contribuir enormemente a la adaptación y mitigación de los efectos del cambio climático.

Los bosques cumplen una función sumamente importante para los seres humanos que habitamos el planeta. Procesan el carbono y lo convierten de nuevo en oxígeno, limpiando el aire para que podamos volver a respirarlo. Son sumideros de carbono, depósitos naturales que absorben el carbono de la atmósfera.

La superficie total de bosques que existen en la Tierra ocupan aproximadamente un 30% de la superficie terrestre del planeta, lo que equivale a 4.000 millones de hectáreas de la superficie terrestre del planeta. Las selvas tropicales son los ecosistemas con mayor biodiversidad de la Tierra, a pesar de ocupar el 2% del planeta. En ellas habitan más del 50% de los seres vivos del planeta.

El Objetivo de Desarrollo Sostenible número 15 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) considera que los bosques deben ser fundamentales para la buena salud del planeta:

«Gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras, detener la pérdida de biodiversidad»

FUENTE: FREEPIK

La sequía, una grave amenaza para los bosques más vulnerables

Los bosques están amenazados por las malas prácticas de los seres humanos como la tala indiscriminada de árboles, pero el otro motivo que pone en riesgo la supervivencia de los bosques por culpa de la sequía y la falta de precipitaciones. La sequía, ocasionada por los efectos del cambio climático, supone un desafío para nuestros estilos de vida.

La aridez de los suelos es una de las principales consecuencias de la sequía. Debido a la erosión y desertificación que sufren con largos periodos de sequía, provoca tormentas de polvo que son muy nocivas para la salud física y mental de los seres humanos que habitan en una determinada región o territorio.

Revitalizar los bosques degradados de la Tierra es primordial para lograr el objetivo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) de incrementar la superficie forestal del planeta en un 3% para el año 2030. Si se consigue este objetivo, los países podrían crear nuevos puestos de trabajo, mitigar el cambio climático, prevenir la erosión del suelo, proteger las cuencas hidrográficas y salvaguardar la biodiversidad.

Fuentes: Redacción Ambientum, CREAF, EFE VERDE



0 0 votes
Valoración
Suscribir
Notificar de
guest

0 Comentarios
Inline Feedbacks
View all comments