Energía de biomasa
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¿Qué es la energía de biomasa?

La biomasa se refiere a cualquier materia orgánica recientemente viva o residuos que pueden ser utilizados como fuente de energía. Esto incluye una variedad de materiales como madera, desechos agrícolas, residuos forestales, residuos sólidos urbanos, cultivos energéticos y algas, entre otros. 

La biomasa puede ser transformada en energía a través de procesos como la combustión, la fermentación y la gasificación. Este proceso de la biomasa nos permite obtener muchas clases de productos, como carbón vegetal, combustibles líquidos o gases.

La energía derivada de la biomasa se considera una forma de energía renovable porque los materiales orgánicos pueden regenerarse a través del ciclo natural de la vida vegetal. Además, la biomasa tiene el potencial de reducir la dependencia de los combustibles fósiles y mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero cuando se utiliza de manera sostenible y eficiente.

La biomasa se puede utilizar para obtener electricidad, calefacción y también serviría de combustible. El uso de energía como fuente principal es todavía muy extraño. En España solo supone un 1% del consumo de energía total. En cambio, los países escandinavos están apostando por esta energía renovable para el uso cotidiano.

Historia de la biomasa

El uso de la biomasa como fuente de energía parece que es algo actual, que está siendo una novedad como energía renovable. Pero esto está muy alejado de la realidad. La biomasa acompañó al hombre prehistórico en todo tipo de actividades. 

Antes de que apareciesen los combustibles fósiles. La biomasa se usaba para calentar, hacer metales y cerámica. La revolución industrial y el desarrollo del carbón, produjo que el uso de la biomasa se fue reduciendo hasta prácticamente desaparecer.

¿Cómo se produce la energía de biomasa?

Los principales procesos para producir energía de biomasa son los siguientes:

  • Combustión: Es la forma más común para obtener energía de biomasa. En este proceso, la biomasa se quema en presencia de oxígeno para producir calor. El calor generado se utiliza para calentar agua y producir vapor, que a su vez impulsa turbinas conectadas a generadores eléctricos para generar electricidad.
  • Gasificación: La gasificación es un proceso en el que la biomasa se somete a altas temperaturas y falta de oxígeno para producir un gas combustible llamado «gas de síntesis». Este gas, compuesto principalmente de monóxido de carbono e hidrógeno, puede ser quemado directamente como combustible o procesado aún más para producir biocombustibles líquidos como el metanol y el biodiesel.
  • Fermentación: La fermentación es un proceso biológico en el que microorganismos descomponen la biomasa para producir biogás.

¿Qué tipos de biomasa existen?

Existen tres categorías principales en las que podemos clasificar la biomasa:

  • Biomasa natural: Es la materia orgánica derivada de animales, plantas u otros organismos que se encuentra en su estado original, sin haber sido procesada o modificada de manera significativa por la intervención humana. Se puede utilizar como fuente de energía renovable o en procesos industriales, entre otros usos. Un ejemplo de este tipo de biomasa son las podas naturales de los bosques.
  • Biomasa residual: Se refiere a la materia orgánica que queda como residuo de actividades humanas o procesos naturales. Estos residuos pueden incluir materiales orgánicos como desechos agrícolas, residuos de alimentos o residuos forestales, entre otros. Se puede utilizar como una fuente de energía renovable mediante su conversión en biogás o biocombustibles, contribuyendo de esta forma a reducir la dependencia de combustibles fósiles y mitigar el impacto ambiental producido por la gestión de residuos.
  • Producida por cultivos energéticos: Es la materia orgánica cultivada específicamente con el propósito de utilizarse como fuente de energía renovable. Estos cultivos se seleccionan y gestionan para maximizar su rendimiento en términos de biomasa y contenido energético.

Ventajas y desventajas de la energía de biomasa

Las principales ventajas de la energía de biomasa son:

  • Energía muy barata y rentable: Favorece la economía circular, se da otro uso a un producto ya utilizado.
  • Es inagotable: En España, el 55% del territorio está ocupado por bosques. Nos ayudará a mejorar su conservación.
  • Independencia energética: Al utilizar recursos locales y renovables, la biomasa puede contribuir a reducir la dependencia de los combustibles fósiles importados.
  • Genera empleo: Las energías renovables es un sector al alza, que crea muchos tipos de empleo. 

“Se trata de una energía muy económica y rentable en su producción, además de inagotable

No todo lo que reluce es oro porque le uso de la biomasa como fuente de energía también tiene alguna desventaja

  • Emisiones Contaminantes: La combustión de biomasa puede generar emisiones de contaminantes atmosféricos. Es cierto que genera menos cantidad que los combustibles fósiles.
  • Sobreexplotación: Si no hay una organización se podría llegar a explotar los recursos naturales.
  • Uso Ineficiente del Suelo: El cultivo de biomasa puede competir con la producción de alimentos y otros usos del suelo, lo que podría tener implicaciones para la seguridad alimentaria y la biodiversidad.

Fuente: Redacción Ambientum



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